Colgante Espiritual Fibonacci de acero inoxidable

Flor de la Vida, geometría sagrada y cubo de Metatrón

Si te preguntas cuál es la conexión entre la flor de la vida y la geometría sagrada, ¡has llegado al lugar indicado!
Bienvenido a nuestro universo de la Flor de la Vida.
En Mandala Flor de la Vida, te mostramos mucho más que solo artículos con patrones de la Flor de la Vida; te abrimos las puertas de la geometría sagrada para que puedas ser, y sobre todo, convertirte en quien realmente eres.
Por supuesto, si compras una camiseta de la Flor de la Vida, o una pegatina, o incluso si colocas un tapiz con un patrón de la Flor de la Vida en tu sala, vas a:
1- cambiar la decoración de la habitación,
2- crear un ambiente más zen,
3- aumentar la vibración de la habitación y de las personas que estén presentes a largo plazo.
¡Y eso ya es muy satisfactorio!
Porque no solo cambia tu estado de ánimo, que de forma casi imperceptible se transforma; tu mente se abre, se calma, se tranquiliza…
Pero además, te ofrecemos realmente entender lo que es la Flor de la Vida y cómo puede cambiar tu vida.

Todo sobre la Flor de la Vida

Desde los años 80, la Flor de la Vida intriga y provoca mucha discusión; en 1999, Drunvalo Melchizedek publicó una obra en dos volúmenes titulada «El antiguo secreto de la Flor de la Vida»; es el libro más completo que existe sobre este tema.
En definitiva, la flor de la vida intriga, pero ¿qué es exactamente?

Definición y origen de la Flor de la Vida:

La Flor de la Vida es una figura geométrica muy antigua. Se ha encontrado en numerosos monumentos antiguos en diferentes lugares del mundo.
La representación más antigua conocida del patrón de los «círculos superpuestos» data del siglo VII o VI a.C., se encontró en el umbral del palacio del rey asirio Aššur-bāni-apli en Dur Šarrukin (hoy en el Louvre).
También se ha encontrado otro patrón dibujado en las columnas de granito del templo de Osiris en Abydos, Egipto; es una figura con cinco patrones de 19 círculos superpuestos.
Está compuesta por 19 círculos espaciados regularmente, que se superponen de manera simétrica.

¿Cómo dibujar la Flor de la Vida?

El instrumento indispensable es, sin duda, el compás. Elije una apertura y mantén la misma distancia hasta terminar la figura, ya que todos los círculos tienen el mismo radio. Comienza dibujando el primer círculo, luego el segundo colocando la punta del compás en un punto del primer círculo; el segundo círculo pasará necesariamente por el centro del primero. Luego, continúa de esta manera y traza tantos círculos como desees. De hecho, este patrón puede repetirse infinitamente.

Flor de la Vida y geometría sagrada:

La Flor de la Vida es una figura de geometría sagrada. Contiene muchos símbolos de geometría sagrada como los sólidos de Platón, el cubo de Metatrón, la Vesica Piscis, la secuencia de Fibonacci… Otros patrones como la semilla de la vida, el árbol de la vida y el germen de la vida se derivan de ella.
Incluso se dice que está relacionada con el famoso dibujo de Leonardo da Vinci llamado «El Hombre de Vitruvio», que representa el cuerpo humano según proporciones divinas.
Se dice que la Flor de la Vida está relacionada con el número áureo y la proporción divina, que se utilizaron para construir las pirámides de Egipto y las catedrales.
Algunos creen que está presente en todas partes, en todas las células, átomos y estructuras moleculares, y tal vez incluso sea el origen de la vida.

¿Qué es la geometría sagrada?

Son figuras especiales debido a sus proporciones o que parecen estar íntimamente relacionadas con el número áureo (o proporción Phi). Se encuentran tanto en antiguos monumentos, la naturaleza e incluso en el cuerpo humano.
A continuación, detallaremos las principales figuras de geometría sagrada:

Los sólidos de Platón:

También conocidos como cuerpos platónicos, son cinco poliedros con propiedades específicas. Sus superficies tienen la misma área; los bordes de cada cuerpo platónico tienen longitudes idénticas; los ángulos formados por todos los bordes entre sí son iguales; si se coloca cualquier cuerpo platónico en una esfera que lo circunscribe en todos los puntos, todas sus puntas tocan la superficie interna de la esfera.
Los sólidos de Platón son el cubo, el tetraedro, el octaedro, el icosaedro y el dodecaedro.

El cubo de Metatrón:

Es uno de los símbolos más poderosos de la geometría sagrada. En realidad, se dice que los cinco sólidos de Platón provienen del fruto de la vida, una figura que está oculta dentro del cubo de Metatrón.

El Merkaba:

Es el cuerpo de luz del ser humano. En su obra, Drunvalo Melchizedek explica el origen de esta palabra. En hebreo, Mer-Ka-Vah significa literalmente «trono de Dios» y «carro» o «carroza»; en egipcio, Mer-Ka-Ba se descompone en Mer que significa «campo de luz», Ka que significa «espíritu» y Ba que representa el cuerpo humano. De hecho, es el cuerpo de luz del ser humano.

La Vesica Piscis:

Es una de las figuras más presentes en la Flor de la Vida y una de las proporciones más importantes. La Vesica Piscis es la figura geométrica formada por la intersección de dos círculos del mismo diámetro, de modo que el centro de cada círculo pertenece a la circunferencia del otro. También se llama mandorla (almendra) y se considera una de las claves del esoterismo pitagórico.

La semilla de la vida:

La semilla de la vida está en el centro de la Flor de la Vida. Está compuesta por siete círculos, como los siete días de la creación. Está compuesta por seis círculos y un círculo central, lo que hace un total de siete. Podemos considerar que está formada por siete semillas de vida.

¿Cuáles son los beneficios de la Flor de la Vida?

La Flor de la Vida es una forma de onda que armoniza todo lo que está desarmónico. Se regenera infinitamente, por lo que no hay nada que hacer para recargarla.
Este símbolo se supone que representa la creación, es decir, el universo entero. Se dice que el símbolo de la Flor de la Vida es el origen de todo lo que existe en la creación, sin excepción; todas las formas de vida biológicas, las estructuras cristalinas, las moléculas de ADN.
De hecho, nos indica que toda la vida proviene de una sola y misma fuente. Todas las formas de vida están íntimamente relacionadas con la Flor de la Vida, lo que significa que todas las formas de vida están interconectadas.

¿Cómo usar la Flor de la Vida?

Antes que nada, es una poderosa herramienta de meditación. Pero también se usa de varias formas en la vida cotidiana.
La Flor de la Vida permite beber agua energizada: simplemente coloca agua en una jarra de la Flor de la Vida durante unas horas antes de beberla.
La Flor de la Vida se utiliza para purificar y cargar los cristales. También se utiliza para crear rejillas de cristales.
Ayuda a conservar mejor los alimentos, los aceites esenciales y en general todas las sustancias que se deseen armonizar y energizar.
También se utiliza para armonizar un espacio como una habitación, una sala de espera, una oficina…
Además, es muy agradable llevarla contigo; ayuda a mantener un alto nivel de energía durante todo el día y actúa como protección, haciéndonos menos permeables a las energías pesadas y no deseadas.
Para ello, puedes elegir una joya como un colgante o un anillo, o usar una prenda como una camiseta, por ejemplo.
Si te gustan los tatuajes, puedes tatuarte una Flor de la Vida en el cuerpo, y en un primer momento, ¿por qué no probar un tatuaje temporal de la Flor de la Vida?