En este colgante, la Flor de la Vida parece multiplicarse hasta el infinito…
Características:
- Colgante de metal y vidrio
- Cadena de metal
- Tamaño del colgante: 25 mm
- Longitud de la cadena: 50-55 cm
- Respetuoso con el medio ambiente: sin plomo, níquel ni cadmio
- Este modelo está disponible en varios colores de metal.
La Flor de la Vida es un instrumento de armonización y protección.
El origen de la Flor de la Vida:
Su representación se ha encontrado en numerosos monumentos sagrados antiguos en Egipto, India, Grecia…
Una de las reproducciones más antiguas encontrada hasta ahora proviene del palacio del rey Assurbanipal en Dur-Sharrukin en Asiria, y data del 645 a.C.
Otra representación de la Flor de la Vida se encontró en una de las columnas de granito del templo de Osiris en Abydos, una ciudad del antiguo Egipto. Abydos es el lugar de culto predominante de Osiris, el dios de los Muertos, y se consideraba la puerta de entrada a la eternidad para los antiguos egipcios. Abydos, como centro de culto de Osiris, es el acceso más importante al más allá.
¿Qué es la Flor de la Vida?
Es una forma de onda que tiene la capacidad de reequilibrar todo lo que está en desacuerdo. Compuesta por 37 círculos que se superponen en 2D pero se entrelazan realmente (en 3D), esta forma de geometría sagrada se considera la fuente de la creación del mundo y contiene todo el cosmos.
Contiene muchas figuras geométricas y se cree que es la base de todas las construcciones del universo, del cuerpo humano y del mundo desde el Origen.
¿Para qué sirve la Flor de la Vida?
Es una figura poderosa de armonización. Permite reconfigurar las moléculas de agua y, por lo tanto, todo lo que está compuesto de ella (como nuestro cuerpo).
La Flor de la Vida revitaliza, regenera, equilibra y dinamiza.
¿Cómo beneficiarse de ella?
Usando una joya de Flor de la Vida
Cuando llevamos una joya de Flor de la Vida, nos envolvemos en un capullo de energías vibrantes más positivas. Esto nos permite estar menos perturbados por otras fuentes de energía discordantes que podemos encontrar durante el día. Es una forma de protección que nos permite mantenernos más centrados en nosotros mismos.
Hay muchos modelos de joyas de metal o piedras preciosas (o semipreciosas). Los más comunes son los colgantes de Flor de la Vida en plata, chapados en plata u oro, o en acero inoxidable. También los hay de oro en una gama de precios más alta.
El beneficio de usar colgantes cuando la longitud de la cadena es suficiente (aproximadamente de 50 a 60 cm) es colocar el colgante a nivel del Plexo Solar. Esto es especialmente útil con un colgante de Flor de la Vida tipo rejilla, que actuará como protección.
La Flor de la Vida también aparece en anillos, pendientes, pulseras y gemelos.
No dudes en echar un vistazo a nuestra colección de joyas, tanto para mujeres como para hombres.
Ofrecemos una amplia selección de joyas de fantasía, así como modelos de plata u oro. Algunas están engastadas con piedras semipreciosas (citrino, granate, labradorita, cuarzo rosa, lapislázuli, aventurina, ojo de tigre, topacio, calcedonia, jaspe, ónix, turquesa, hematita, aguamarina, amazonita, cornalina, ágata, amatista, ópalo, turmalina, peridoto, piedra lunar, malaquita).
Una piedra semipreciosa es menos costosa que una piedra preciosa (diamante, rubí, zafiro, esmeralda), y sin embargo tiene cualidades igualmente interesantes en la litoterapia.
El cristal de roca es un poco diferente. Podría reemplazar a todas las demás piedras.
La circonita cúbica o circonio es económica y se utiliza con frecuencia en joyería. Su fórmula química es ZrO2 y es una piedra sintética.
La forma más rápida de determinar si se trata de diamantes reales o falsos (circonitas cúbicas) es su temperatura de contacto. Si la piedra parece fría al tacto, probablemente sea un diamante real. Pero si se siente caliente, probablemente sea una piedra sintética. La capacidad de un material para transferir su temperatura durante el contacto se llama efusividad y se calcula mediante una fórmula matemática. Los joyeros utilizan un efusivímetro para verificar si se trata de gemas reales.
¿Joya de Flor de la Vida de metal o de piedras preciosas?
Hay colgantes de cristales naturales en los que se ha grabado una Flor de la Vida dorada. De esta manera, podemos disfrutar de las propiedades combinadas de los minerales y la Flor de la Vida.
¿Qué metal elegir para una joya de Flor de la Vida?
Si te lo puedes permitir, puedes comprar una Flor de la Vida de oro. De hecho, el oro tiene una energía solar muy intensa que transmite a quien lo lleva. Puedes encontrarlos en oro blanco, oro amarillo o oro rosa.
Un colgante de plata 925 será menos costoso que joyas de oro o platino, pero igual de duradero. También encontrarás colgantes de plata maciza chapados en oro de 18 quilates.
Hay muchas joyas hechas de acero inoxidable. Es un material ideal porque no se oxida, no se deforma (es prácticamente indestructible) y es hipoalergénico.
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